Espigas verdes de trigo (campo de amapolas 1888)

ESPIGAS VERDES DE TRIGO
(CAMPO DE AMAPOLAS, 1888)

Los célebres campos de amapolas de Claude Monet (1840-1926) son ligeros y delicados. Van gogh, por su parte, trató el mismo tema con mucha más fuerza, densidad y expresividad. La indefinición de las formas, típica del impresionismo, se mantiene hasta cierto punto y se desarrolla de uoa manera más abrupta, casi violenta: los colores son puros y mucho más intensos. Los rojos y verdes complementarios entablan un juego de contrastes que genera un efecto muy llamativo. Después de dejar París, Van Gogh ganó mucha confianza en sus habihdades como artista, y decidió integrar en su obra las prácticas y las técnicas de otros pintores como Monet. Una de ellas consistía en desechar los tradicionales esbozos y estudios prehminares al óleo para pintar directamente en plen air sobre el henzo. Esto no significa que su obra fuera totalmente espontánea. El cálculo y la premeditación siempre estaban presentes en la versión final, pero con este sistema se abría un espacio a la experimentación que se mantenía basta la óltima pincelada. Van Gogh llegaba incluso a aplicar la pintura directamente del tubo al lienzo, lo que muy bien pudo ocurrir en este caso. El artista empleó en el primer plano la técnica del impasto con bastante entusiasmo.