Hacer una pantalla para una lámpara

Seda y algodón destacan como las más comunes


No hay nada más decorativo en un hogar que la luz. Ya sea natural o artificial, cuando ésta inunda las estancias, podemos disfrutar mucho más, si cabe, de la placidez de nuestra vivienda. Por la tarde y por la noche, las lámparas de pie nos ofrecen un punto de luz localizado, ideal para leer, cenar o, simplemente, proporcionar un ambiente cálido a la habitación. Las pantallas de las lámparas se convierten el accesorio fundamental para decorar la vivienda y tamizar esa luz tan imprescindible.

Para confeccionarlas se utilizan todo tipo de materiales, aunque las telas de diferentes texturas suelen ser las más utilizadas. Seda y algodón destacan como las más comunes, aunque también se recurre a pergamino, cartón, rafia, cristal o plástico. Respecto a otros elementos ornamentales hay de todo: desde los distintos colores que ofrecen las pinturas, hasta el raso, la pasamanería o los bordados.

Si tu vieja lámpara ha agotado todas sus posibilidades decorativas debido a una pantalla obsoleta, te animamos a que fabriques una con tus propias manos. Para ponerte manos a la obra sólo necesitas un poco de imaginación, una idea original y los materiales adecuados. Nosotros te proponemos la fórmula más sencilla para que, a partir de aquí, puedas realizar diseños más sofisticados.

Qué necesitas y cómo se hace
Para empezar, no te deshagas del armazón de la pantalla de tu lámpara, podemos reutilizarlo para este nuevo proyecto. No obstante, también se los puedes encontrar en tiendas especializadas, por si el tuyo está inservible. Asimismo, compra cartulina o papel de pergamino, y hazte con tijeras, pinzas de la ropa, regla, pegamento y un lápiz.

Lo primero es tumbar sobre la cartulina el armazón. Con el lápiz marcamos las líneas que va describiendo la cartulina al rodear el armazón, dejando 2 cm. en el lateral para la unión y 1 cm. más por el borde. Recortamos con las tijeras y forramos con la cartulina la estructura. Para que se pegue usamos cola o pegamento y, para fijarlo, pinzas de la ropa. Para que la adhesión sea la adecuada, tenemos que dejarlo secar al menos 6 horas.

Modelos más completos
Ahora es el momento de darle a tu lámpara su imagen definitiva. Si deseas que sea de rafia, cubriremos el armazón con este material y dejando unidos verticalmente los dos aros. Para que no se vea la estructura, ten cuidado de que las hebras de la rafia estén bien juntas.

Para una lámpara poligonal (con forma cúbica o de poliedro), cogeremos una de las caras del armazón como plantilla, poniéndola sobre el cartón. Marcaremos tantas caras como lados tenga la estructura, dejando 1 cm. de borde para adherir los dos extremos. Para rematar, forramos la cartulina con una tela que nos guste y terminamos con un galón (una cinta que sirve para guarnecer vestidos y tejidos diversos).

En el caso de que queramos confeccionar una pantalla plisada, forraremos primero la estructura con tela blanca. Multiplicamos por 2,5 el largo del perímetro de la pantalla y al ancho le añadimos 3 cm. Con estas medidas, cortamos un rectángulo de tela. Para finalizar, plisamos el tejido resultante, se sobrehila a los aros y se remata con galones.

¿Quién dijo que cambiar de aire una habitación fuese complicado? Como has podido ver, con estas pequeñas ideas, ya puedes reconvertir las lámparas de tu casa, dándole la imagen que más te guste y con la satisfacción de haberlas

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