Jabones vegetales: pepino, corteza de naranjas y limones

Medianamente sólido con burbujas cremosas, Decorativo


Las frutas y las hortalizas son ingredientes fundamentales a la hora elaborar jabones artesanales en casa. Sus excelentes propiedades para la piel hacen de ellas nuestras mejores aliadas en los tratamientos higiénicos y cosméticos. Por eso, en esta ocasión, os recomendamos dos jabones únicos: de pepino, uno de los vegetales más utilizados para las mascarillas; y de San Clemente, elaborado con cítricos, frutas conocidas por sus propiedades antioxidantes y antigrasa. Toma nota de todo lo que necesitas para ponerte manos a la obra.

Fresco como el pepino
Este pequeño e interesante jabón contiene pepino fresco que da unas brillantes motas verdes. Para preservarlas, hemos de añadir unas gotas de extracto de semilla de pomelo, que también acelera el proceso de cuajado. Como es difícil encontrar un aceite con fragancia de pepino, aquí se ha optado por ponerle uno de perfume de pera.

Tipo de jabón

  • Medianamente sólido con burbujas cremosas.
  • Decorativo.
  • Apropiado para todo tipo de piel.

Ingredientes:

  • 395 gr. de aceite de coco,
  • 282 gr. de grasa vegetal,
  • 226 gr. de aceite de oliva,
  • 1 taza de pepino fresco (sin pelar y cortado a trozos),
  • 415 gr. de agua destilada o mineral,
  • 143 gr. de hidróxido de sodio (lejía),
  • 2,5 ml. de extracto de semilla de pomelo,
  • 1 cucharada sopera (15 ml.) de aceite de fragancia de pera.

Elaboración:
Engrasa el molde. Pesa las grasas y los aceites de base y ponlos a fuego lento. Mientras se mezclan las grasas, pesa el agua y viértela en un cuenco o jarro de vidrio o plástico fuertes. Añade el pepino en trozos y lícualo bien. Con unos guantes de goma y protección para los ojos, echa en el agua con el pepino el hidróxido de sodio (lejía) y remueve hasta que se disuelva. Cuando los aceites y grasas se hayan derretido, retíralos del calor. Pon un termómetro de fluidos en los aceites y otro en la solución cáustica. Cuando ambos termómetros alcancen entre los 49 y los 60 ºC, vierte la solución cáustica en el aceite. Remueve intermitentemente hasta que la mezcla se espese y forme el cuajo. Esto suele tardar unos 20 minutos.

Añade la fragancia de pera y remueve bien. Viértelo enseguida en el molde y cúbrelo con una toalla o manta. Déjalo asentar 24 horas o hasta que el jabón tenga una consistencia sólida. Llevando unos guantes de goma, empuja el jabón fuera del tubo, y córtalo en lonchas. Cubre el jabón y ponlo a secar durante cuatro semanas antes de utilizarlo.

San Clemente
Este jabón contiene corteza de naranjas y limones finamente rallada con un poco de benzoína para preservarlos. Aquí se usa la cúrcuma como colorante, pero puedes sustituirla por un pigmento cosmético.

Tipo de jabón:

  • Duro y ceroso con burbujas medianas.
  • Duradero.
  • Adecuado para pieles grasas.

Ingredientes:

  • 395 gr. de aceite vegetal,
  • 282 gr. de aceite de coco,
  • 226 gr. de aceite de palma,
  • 56,5 gr. de cera de abejas,
  • 297 gr. de agua destilada o mineral,
  • 143 gr. de hidróxido de sodio (lejía),
  • 113 gr. de agua de azahar,
  • 1 taza de mezcla con cáscara de naranja y limón finamente rallada,
  • 2 cucharaditas de cúrcuma en polvo,
  • 1 cucharada (15 gr.) de aceite de esencia de naranja y una de limón,
  • 1 cucharadita de benzoína líquida o en polvo.

Elaboración:
Pesa por separado las grasas de base, aceites y ceras, y deja que se derritan en un recipiente de esmalte o acero inoxidable a fuego lento. Apaga el fuego y déjalo reposar hasta que alcancen una temperatura aproximada de 54,4 ºC, removiendo de vez en cuando. Vierte en el agua los gránulos de hidróxido de sodio y remueve hasta que se disuelvan. Déjalo hasta que la temperatura se estabilice en 54 ºC. Lleva protección en ojos y manos.

Añade la solución de hidróxido de sodio a las grasas y remueve con cuidado. Remueve intermitentemente. Antes del cuajado, rocía la piel de los cítricos y remueve intensamente. La mezcla estará espesa hasta el punto en que se pueda hacer gotear un poco de jabón desde el reverso de la cuchara y deje una línea dibujada en la superficie de la mezcla. Esto es lo que se llama cuajo.

Al cuajar añade los aceites de esencias, la benzoína y la cúrcuma y remueve bien. Viértelo enseguida en el molde y cúbrelo con una toalla o una manta. Déjalo asentar 24 horas o hasta que el jabón adquiera una consistencia sólida. Llevando unos guantes de goma, saca el jabón fuera del molde y córtalo en pedazos. Tapa el jabón y ponlo a secar durante cuatro semanas antes de utilizarlo.

  • http://www.facildehacer.com/manualidades/?pagina=045_045