La cultura del espectáculo El Libro de los Abrazos Eduardo Galeano

Fuera de la pantalla, el mundo es una sombra indigna de confianza.


Fuera de la pantalla, el mundo es una sombra indigna de confianza.

Antes de la televisión, antes del cine, ya era así. Cuando Búfalo Bill agarraba algún indio distraído y conseguía matarlo, rápidamente procedía a arrancarle el cuero cabelludo y los plumajes y demás trofeos y de un galope llegaba desde el Lejano Oeste a los teatros de Nueva York, donde él mismo representaba la heroica gesta que acababa de protagonizar. Entonces, cuando se abría el telón y Búfalo Bill alzaba su cuchillo ensangrentado en el
escenario, a la luz de las candilejas, entonces ocurría, por primera vez ocurría, de veras ocurría, la verdad.