• Un juego de sábanas viejo o nuevo
• Pintura para género
• Pinceles
• Hojas de árboles de distintos tipos y tamaños (se recomiendan las de nervaduras bien marcadas y las de formas caprichosas)
1. Elegida la hoja que va a ser estampada, pintarla sólo por la cara frontal con una delgada y homogénea capa de pintura.
2. Ponerla boca abajo en contacto con la sábana, cubrirla con un pedazo de papel y presionar fuertemente con la palma de la mano (conviene hacer algunos ensayos previos ya que una vez estampada la hoja, el proceso es irreversible). Una hoja puede ser usada varias veces simplemente volviendo a pintarla cada vez que se estampe. Para tener una visión general del diseño, se recomienda disponer las hojas sobre la sábana antes de pintarlas hasta dar con una idea que funcione.
3. Finalmente, planchar por el revés de la sábana para que la pintura se fije al género. Algunos trucos: los errores se pueden retocar con un pincel finito. Una hoja ya estampada puede ser repasada volviendo a pintar el original y haciéndolo calzar perfectamente con el estampado que no quedó tan bien.